El helado es una de las grandes cosas de Mendoza. Según se dice en los anuncios, Mendoza es la tierra del Sol y del Vino, ambas cosas ya han sido comprobadas por esta chica. Pero creo que también debería decir que es la tierra del helado!!!
En este lugar, este delicioso platillo es bastante caro, pero, vale la pena gastar unos pesitos en esto ya que te hace muy muy feliz y hay tanta variedad que es imposible no caer en sus redes de sabor.
Los sabores van desde lo clásico (Chocolate, Fresa, Vainilla) hasta los más extraños como Vainilla a la Malbec, Melocotón Syrah y Ananá (Piña) Viognier, pasando por Crema Rusa, Mascarpone con frutos del bosque, Naranja Marmolada (con chocolate), Kinotos al Wiskey, Mosse de Limon, Flan con dulce de leche, Dulce de Leche con Brownie, Cookies & Cream, Maní con Chocolate etc, etc, etc...
En este lugar he conocido al rededor de 10 heladerias, y unos 20 sabores o más. Tengan en cuenta que hubo una semana en que todos los días comí helado, así que más o menos ya soy una experta jajaja.
Lo mejor de este postre, es devorarlo mientras se camina por las apacibles calles de Mendoza (a la hora de la siesta claro) o lo que yo casi siempre hago: Comer uno en la compañía de los amigos.
En la foto pueden verme al lado de Adrian y Meike, en una heladeria que se llama Mailhó, una de nuestras preferidas. En este caso, pienso yo, una imagen vale más que mil palabras...
¡¡¡Arre Lulú!!!
Dedicada a Adrian
Hoy se fue a Buenos Aires y de allí de regreso a México
Te voy a extrañar Mexicanito
Gracias por esas tardes de Helado
Gracias por Todo
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