20090504

Shut up & sleep with me!


Hablemos de la Influenza... Sí claro, como si no hubiera perdido el tiempo suficiente hablando de ello, pensando en ello, encerrada por ello!!! La verdad quería que la proxima entrada fuera por un cuento que estoy escribiendo acerca de la espera, pero aun estoy esperando a que llegue la inspiración y pueda terminarlo de un modo decoroso... o algo asi.



Ahora estoy "haciendo un trabajo" que no me decido a empezar y más bien pierdo el tiempo en esta cuestión que nadie lee JA!



Hace un momento, cuando iba caminando por la calle estaba pensando en que las relaciones se van gastando con el tiempo, o desechando porque conseguimos algo mejor. Hay personas de las que ni siquiera recordamos el nombre, o saludamos cuando vemos en la calle e incluso olvidamos que hicieron algo por nosotros o que compartieron un momento con nosotros. Simplemente cambiamos de lugar, de tiempo, de gente, de espacio.



A veces cambiamos tambien a la gente con la que estamos, o cambiamos la relación que existe, de amigos a conocidos, de conocidos a mejores amigos, de amigos a novios, de novios a desconocidos, de desconocidos a novios, de desconocidos a amantes, de amigos a amantes, en fin, las combinaciones pueden ser infinitas, o finitas, pero camibios al fin.



¿Queremos ser lo que somos? ¿En lo que nos estamos convirtiendo? ¿En lo que convertimos y nos convierten? ¿Hay otra opción?



"La experiencia mística culmina en la visión del ser o de la vacuidad, pero siempre, plenitud o vacío, se inicia como una crítica de este mundo y una negación de sus valores. La otra realidad exige la abolición de esta realidad" (Paz, O. [1981] Corriente alterna, México Siglo XXI )

1 comentario:

Alan dijo...

Siempre cambiamos a la gente, y ya gente nos cambia a nosotros, porque nosotros cambiamos.

¿Será útil esa mutabilidad?

Me quedé pensando en un personaje de novela: ¿ operar esos cambios harán que se vuelva inestable y desaparezca? ¿se volverá tan increíblemente cambiante, tanto como tú y como yo que ya nadie lo creerá?

Holden