20100330

Pitos y Puchas


Los Pitos y las Puchas son como los camaleones que se mimetizan con su ambiente dependiendo de la situación en que se encuentren:




  • Son un poco hippies y sólo buscan amor y paz por medio de un pasón de diferentes cuestiones, siendo el favorito de todos, (a excepción de los fetichistas que prefieran un pasón de otras cosas) un pasón viscoso entre ellos, con un cúlmine viaje astral por el temblor orgásmico.



  • Buscan también instruirse en lenguas, siendo predilectas las modernas, debido a que las muertas pierden elasticidad; y se retuercen de placer cada vez que aprenden una nueva palabra (por alguna razón les encantan las que están llenas de vocales).



  • Son de clase obrera y viven muchas veces de la calidad de su mano de obra, trabajando para su eterno patrón el Celibato, que disfruta de la explotación y el sufrimiento que causan las eternas horas de espera entre un coito y el otro.



  • Se vuelven estilistas amantes del afro, el corte militar o incluso la calvicie dependiendo el clima, la humedad y las peticiones de cuarto que puedan llegarse a dar...

Sin embargo, el papel más importante de los Pitos y las Puchas es el termómetro psicológico que representan para sus dueños. Todo mundo sabe que no es lo mismo una Pucha feliz a una triste; y que un Pito deprimido que cuelga inerte entre las piernas de un desdichado, significa muchas veces más de lo que una lágrima puede expresar rodando cuesta bajo por la mejilla.


Los Pitos y las Puchas son personajes valientes en la vida diaria, que casi siempre dejamos olvidados bajo nuestra ropa interior porque no queremos escuchar la sinceridad de sus acciones. Quizá no esté tan mal eso de pensar con el cerebro en el Pito o el corazón en la Pucha y viceversa ¿No?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pero venga! está genial tu texto Lucía...